Evidencias científicas, arqueológicas, lingüísticas y culturales del Libro de Mormón

Busca en Nuestro Sitio
07 diciembre 2007
06 diciembre 2007
¿POR TIERRA O POR MAR ?
las veces que he conversado con personas que intentan y digo intentan por que no pasan de eso, siempre discuten el tema de como se poco de como se poblo america, ahora un articulo que nos aclara un poco.
¿Por tierra o por mar? Una nueva visita al estrecho de Bering
Basado en el trabajo de investigación llevado a cabo por Allen J. Christenson.
Traducido por Estrella La Font Díaz
Tradicionalmente, la mayoría de los antropólogos han aceptado la teoría de que los antepasados de todas las culturas nativas americanas existentes en el Nuevo Mundo proceden de migraciones a pie desde Asia ocurridas durante el pleistoceno; en este período, el nivel del mar estaba más bajo, de forma que ambos continentes se hallaban conectados por una estrecha franja de tierra denominada el Puente de Tierra de Bering. Pero, como demuestra una reseña aparecida en el último número de BYU Studies1, el trabajo del Dr. E. James Dixon, en Quest for the Origins of the First Americans [En busca de los orígenes de los primeros americanos], propone un desafío para este modelo tradicional2.
Dixon es una destacada autoridad en la arqueología de la Beringia oriental, la cadena de islas que en otro tiempo formó el puente que conectaba Asia con lo que actualmente es la tierra de Alaska. Aunque nadie duda de la existencia de dicho puente, ni de su potencial como conducto para la migración humana, Dixon demuestra que éste no podía haber sido el único mecanismo para poblar las Américas. Presenta pruebas impresionantes y muy convincentes que sugieren que los primeros o al menos algunos de los primitivos habitantes de la Antigua América realmente llegaron en embarcaciones preparadas para el océano.
El estudio geológico y paleoecológico de la región de Beringia sugiere que no fue sino hasta más o menos el 9.500 a. C. cuando el Puente de Tierra de Bering se hizo transitable para las migraciones humanas por tierra. En consonancia con esta fecha, no existen pruebas documentadas de que hubiera habido asentamientos humanos en ningún lugar del pasadizo beringio hasta el 9.000 a.C. Sin embargo, hay amplia evidencia de ocupaciones previas a lo largo de las costas occidentales tanto de Norteamérica como Sudamérica cuya fecha es anterior a ésta en al menos dos o tres mil años y en algunos casos muchos miles de años más. Puesto que, al parecer, no había forma de cruzar por tierra en tan tempranas fechas, Dixon señala que estos asentamientos deben de haber sido fundados por pueblos marineros.
El hecho de que las costas del Pacifico en Asia se hallaban salpicadas de numerosos asentamientos está bien documentado. Dixon sugiere que poco antes del 12.000 a.C. el nivel del mar subió rápidamente debido a un abrupto calentamiento del clima, lo que hizo que el mar se tragara las comunidades de la costa del Pacífico asiático (algo así como un Waterworld del Pleistoceno). Esto podría haber provocado migraciones hacia el este, siguiendo las principales corrientes de agua, hasta el Nuevo Mundo. Para cuando el Puente de Tierra de Bering se hizo transitable, los descendientes de estos primeros viajeros ya se habían asentado en gran parte del la línea costera occidental de América del Norte y del Sur, e incluso se habían trasladado al interior en algunas áreas.
Desde hace tiempo, los eruditos Santos de los Ultimos Días han mostrado su interés por la cuestión de los viajes transoceánicos hacia el antiguo Nuevo Mundo3, pero han encontrado poco apoyo entre los principales expertos. En una época, el propio Dixon recibió críticas de varios de sus colegas por sugerir la posibilidad de que se hubieran producido migraciones transoceánicas por lo que se le aconsejó que abandonara el tema si es que no quería perder su credibilidad profesional (p. 129). Dixon cree que la idea de la existencia de contactos transoceánicos precolombinos entre el Nuevo y el Viejo Mundo no tiene acogida a causa de la tendencia de algunos individuos que, ajenos al campo, van demasiado lejos en sus intentos por explicar todas las similitudes que existen entre las dos grandes regiones culturales, haciéndolo de manera indiscriminada sobre la base de su difusión a través de los océanos.
Pero los hallazgos fruto de la investigación y cuidadosamente presentados, como son los de Dixon (así como los de un creciente número de otros investigadores), dejan claro que antiguamente los humanos eran capaces de viajar largas distancias a través de los océanos para visitar o colonizar partes del Nuevo Mundo. Por extensión, es razonable concluir que las pequeñas colonias de jareditas, lehitas, y mulekitas también podrían haber realizado tales viajes.
NOTAS
1. 36/2 (1995-1996). Véase también el excelente tratamiento que realiza Stephen C. Jett sobre la cuestión de los contactos transoceánicos, disponible como reimpresión en el formulario de pedidos.
2. (Albuquerque: University of New Mexico Press, 1993).
3. Véase John L. Sorenson y Martin H. Raish, Pre-Columbian Contacts with the Americas across the Oceans: An Annotated Bibliography (Provo: Research Press, 1990).
03 diciembre 2007
Evidencia de la autenticidad del Libro de Mormón
Esto lo encontre en la pagina web www.AllAboutMormons.com , mensiona alguna de las evidencias como un resumen , talvez seria bueno hacer un gran resumen de puntos como evidencia, quitando los argumentos, pero citando donde se encuentran, bueno se los dejo...
Evidencia de la autenticidad del Libro de Mormón
Por AllAboutMormons.com Webmaster - 30-11-2007
Muchas personas que están investigando la iglesia mormona encuentran propaganda anti-mormona. Contrario a lo que los anti-mormones quieren que creas, de hecho existe evidencia que apoya al Libro de Mormón. Como la Biblia, la evidencia del Libro de Mormón es circunstancial, no concluyente. No obstante, estas “pruebas” son muy convincentes.
Mientras que la evidencia es interesante, sería un error creer en el Libro de Mormón solo por prueba académica. La prueba académica es materia de constante revisión, pero un testimonio del Libro de Mormón dado por Dios no está sujeto a cambios.
Hay muchas pruebas de la autenticidad del Libro de Mormón. Aquí hay algunas:
1. El Libro de Mormón describe los viajes de un hombre llamado Lehi y su familia de Jerusalén a las orillas del Mar Rojo. A pesar que el hecho que detalla a las arabias no estuvo disponible para José Smith, el Libro de Mormón cuenta con exactitud la geografía y la geología árabe.
1. El camino tomado por Lehi en el Libro de Mormón corresponde a un camino principal en la antigua arabia.
2. A pesar de que el material de hierro es raro en las arabias, el mineral está exactamente donde el Libro de Mormón indica.
3. A pesar de que por años la gente creyó que no habían ríos que desembocaran al Mar Rojo, existe un río exactamente donde el Libro de Mormón indica.
4. A pesar de que los mapas detallados de las arabias no estaban disponibles para José Smith, hay un sitio llamado “nehem” (que no es mencionado en la Biblia) en el mismo lugar donde el Libro de Mormón indica, y significa "duelo y consuelo", en perfecta armonía con la descripción dada en el Libro de Mormón.
2. José Smith no fue el único quien vio las planchas de metal en cuales fue grabado el Libro de Mormón. Otros quince hombres también vieron las planchas y dieron una descripción de ellas. Sus testimonios pueden encontrarse en las copias modernas del Libro de Mormón.
3. José Smith fue ridiculizado por años al decir que el registro del Libro de Mormón fue gravado en planchas de metal. Evidencias arqueológicas recientes han mostrado que el hacer registros en planchas metálicas de hecho fue una práctica antigua del Medio Oriente. De hecho, recientemente se ha descubierto un registro gravado en planchas de oro. Fue hecho por los Etruscos que fueron personas que tenían sus orígenes en el Medio Oriente (Turquía). Estas planchas tenían anillos de oro a los lados, exactamente como el registro original del Libro de Mormón.
4. Muchos han criticado al Libro de Mormón porque fue escrito en egipcio “reformado”. Ellos argumentan que los israelitas verdaderos nunca usarían el lenguaje de sus enemigos. Descubrimientos recientes han demostrado, no obstante, que se han conocido escritos egipcios reformados o modificados, incluyendo las formas demóticas y heriáticas.
5. El Libro de Mormón describe a un hombre llamado Mulek (una forma corta de Malkiyahu) quien fue el hijo del Rey Israelita Malaquías; muchos han criticado al Libro de Mormón ya que ciertas lecturas (comunes) de la Biblia sugieren que Malaquías no tenía hijos. Sin embargo se ha descubierto recientemente en Jerusalén un sello antiguo con el titulo "Malkiyahu el hijo del rey”.
6. También hay pruebas de que el Libro de Mormón es, de hecho, una traducción de un antiguo texto hebreo, al igual que José dice.
1. Contiene muchas formas poéticas llamadas "chiasmus". La importancia del chiasmus en escritos antiguos semitas se reconoce sólo en el siglo pasado. José Smith no podría saber de ellos.
2. El manuscrito original del Libro de Mormón también contiene muchas frases gramaticalmente extrañas que desde entonces se han corregido. Por ejemplo, en lugar de "si... entonces...", el manuscrito original utiliza a menudo "si... y..." Esta construcción de "... y si..." no se encuentra en la Biblia y no es común en el inglés. Sin embargo, corresponde exactamente con el condicional hebraico.
3. El Libro de Mormón utiliza unos 200 nuevos nombres que no se encuentran en la Biblia. Los recientes descubrimientos de las antiguas inscripciones hebreas han afirmado muchos de estos nombres “inventados”, inclusive Ajá, Ammoniah, Chemish, Hagoth, Himni, Isabel, Jarom, Josh, Luram, Mathoni, Mathonihah, Muloki y Sam. ¿Cómo podría haber sabido José que estos nombres eran auténticos nombres hebreos?
4. El Libro de Mormón usa el nombre de "sheum" para describir un grano. Aunque José Smith no podía saber, "sheum" es, en efecto, un antiguo nombre del Oriente Medio para “grano”.
5. El Libro de Mormón describe un pueblo que se les dio una tierra llamada "Jersón" "para una herencia." “Jersón" en realidad significa "una tierra de la herencia" en el antiguo idioma hebraico.
7. A pesar de que José Smith no podía saber de muchos de los detalles de los antiguos cultivos de olivos (ya que no se mencionan en la Biblia), el Libro de Mormón describe la antigua práctica Israelita con gran exactitud.
8. El Libro de Mormón describe antiguas fortificaciones que son notablemente similares a las encontradas en excavaciones arqueológicas recientes en las Américas.
9. El Libro de Mormón describe un pequeño grupo de personas que vinieron de Israel para las Américas (probablemente Centroamérica, aunque en el Libro de Mormón no se especifica la ubicación exacta). El Libro de Mormón sugiere que este grupo relativamente pequeño de personas últimamente se mezcló con los pueblos que han emigrado a las Américas a través del estrecho de Bering. Curiosamente, hay pruebas sustanciales de una influencia hebrea en el idioma uto-aztecano de Centroamérica. Aunque uto-aztecano no se deriva del hebreo, el hebreo parece haber influenciado su desenvolvimiento. Hay más de 1000 similitudes entre el antiguo hebreo y uto-aztecano, inclusive el uso del plural sufijo "-im" en hebreo e "-ima" en uto-aztecano, el pasivo prefijo "ni-" en hebreo y el prefijo "na-" en uto-aztecano, la palabra hebrea "yasab" y la palabra uto-aztecana "yasipa", que significan "sentarse o detenerse", la palabra hebrea "adán" y la palabra uto-aztecana "otam", que significan "hombre", la palabra hebrea "katpa" y la palabra uto-aztecana "kotpa", que significan “los hombros”, las palabras hebreas "ya-'amin" y las palabras uto-aztecana "yawamin", que significan “él acredita”, etc. El Dr. Roger Westcott, un profesor emérito de antropología y lingüística en la Universidad de Drew (quien no es mormón), así como otros, han confirmado que estas similitudes no pueden ser ignoradas.