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20 mayo 2014

El Libro de Mormón: Evidencias externas, parte I

Las investigaciones modernas sobre la ruta de Lehi, hoy nos permiten atestiguar que quienes escribieron El Libro de Mormón, fueron personas que efectivamente realizaron el viaje, lugares como el Valle de Lemuel, Nahom o Abundancia cuentan hoy en día con un soporte geográfico verdadero.

Autor(es): www.filmsviajedefe.com

De Jerusalén a Abundancia

Book of Mormon

El Libro de Mormón contiene relatos de varios pueblos diferentes, que abarcan un período de mil años, armonizados y compilados en una sola narración por un padre y su hijo; Mormón y Moroni, quienes vivieron alrededor del año 400 d.C., incluyendo un relato de la visita de Jesucristo al pueblo nefita en las Américas luego de Su resurrección.

El primer artículo de evidencias externas se enfoca en lo que se ha determinado acerca del viaje de Lehi desde Jerusalén hasta el punto de la costa sur de Omán donde él y su familia partieron por mar al Nuevo Mundo.[1]

En 1976, Lynn y Hope Hilton viajaron de Arabia Saudita y el sur de Omán para intentar establecer el punto del que Lehi y su familia partieron al continente americano.[2] A raíz de ese viaje inicial, se han hecho varias incursiones no sólo para descubrir la “Abundancia” del Libro de Mormón, (ver 1 Nefi 17:5), sino también la ruta que Lehi y su familia tomaron desde Jerusalén.

S. Kent Brown ha realizado una extensa investigación, tanto por su cuenta como con un equipo de expertos de varias universidades en la antigua ruta de comercio conocida como la Ruta del Incienso––la posible ruta de Jerusalén. Estos hallazgos han sido una característica regular de Journal of the Book of Mormon and Other Restoration Scripture (Diario del Libro de Mormón y otra Escritura de la Restauración).[3]

Jerusalén

También se ha realizado bastante trabajo para conectar el relato del Libro de Mormón con lo que se conoce de Jerusalén del año 600 a.C. En el 2004, el Instituto Maxwell publicó Glimpses of Lehi’s Jerusalem (Atisbos al Jerusalén de Lehi), editado por John W. Welch, David R. Seely y JoAnn H. Seely.
Este libro intenta responder tales preguntas y vislumbrar partes de ese mundo. Mucho de esa era se perdió para siempre, por supuesto, cuando las advertencias de muchos profetas se cumplieron cuando Jerusalén fue destruida por los babilonios poco después que Lehi dejara Jerusalén. El Templo de Salomón y los muros de la ciudad fueron derribados. Los edificios fueron quemados, los tesoros fueron saqueados. La gente fue asesinada o deportada. Muchos registros fueron destruidos, y ciertas creencias religiosas fueron cambiadas o extinguidas. La mayoría de lo que sabemos acerca de estos eventos viene de relatos escritos por algunos de los sobrevivientes y están influenciados por sus ideas. La evidencia arqueológica y textual nos permite enlazar sólo una parte de esto y un poco de aquello. Sin embargo, cuidadosamente unidos entre sí, éstas instantáneas se funden en una vista útil e interesante.[4]
Valle de Lemuel

El primer punto en el relato del viaje de la familia de Lehi hacia el desierto más allá de Judea es el “Valle de Lemuel”, llamado así por Lehi:

“Y [Lehí] descendió por los contornos cerca de las riberas del Mar Rojo, y viajó por el desierto por los lados que están más próximos a este mar;… y aconteció que después de haber viajado tres días por el desierto, asentó su tienda en un valle situado a la orilla de un río de agua. … Y dijo también a Lemuel: ¡Oh, si fueras tú semejante a este valle…!” (1 Nefi 2:5-10). Después de esto se le conocía como el “Valle de Lemuel” (ver 1 Nefi 2:14, 9:1; 10:16: 16:6). S. Kent Brown, al resumir los intentos por descubrir la ubicación de este valle, determina que Wadi Tayyib al-Ism al noroeste de Arabia es un muy posible candidato:
El cañón, llamado Wadi Tayyib al-Ism, parece encajar cómodamente en la descripción de Nefi de un “valle, firme, constante e inmutable” presentando un “río, fluyendo continuamente” (1 Nefi 2:9-10). Este hallazgo se establece en el perfil debido más a que los estudios han concluido que “el Mar Rojo… se ha quedado sin un solo río que fluya. Con respecto a esto, el Mar Rojo es único”. Sólo en la costa de Yemen se encuentra arroyos durante todo el año, tal como el Wadi Hagr que desemboca al sur, pero no en el Mar Rojo.
Puede parecer que el hecho de que no desemboque actualmente en el Mar Rojo lo descartaría, pero, como Brown continúa explicando que con el pasar del tiempo la tierra se ha elevado de manera que, “existe clara evidencia geológica de que la línea de la costa del noreste de Arabia se ha estado elevando. …todos los indicadores geológicos indican la desembocadura del Wadi Tayyibg Al-Ism que yacía bajo las aguas del Mar Rojo en la antigüedad”.[5]

Nahom

Cuando Lehí y su familia, ahora aumentados por la familia de Ismael, cuyos hijos se casaron con los hijos de la familia de Lehí (ver 1 Nefi 16:7), iban bien en su viaje por el desierto, Ismael murió: “Y aconteció que murió Ismael, y fue enterrado en el lugar llamado Nahom” (1 Nefi 16:34). Nuevamente, Kent Brown resume para nosotros el significado de esta mención aparentemente insignificante,
Hugh Nibley y otros, dado que él había observado que la frase pasiva, “el lugar llamado Nahom” (énfasis añadido), denota que el nombre ya había sido dado a esa zona por los habitantes locales donde el grupo de Lehí había llegado. A diferencia del caso del “Valle de Lemuel”, Lehí, el padre, no le puso su propio nombre a este lugar. Ya había otras personas allí y el pequeño grupo tenía que hacer frente a su presencia.
En un templo Barán en Marib, la antigua capital del reino Sabeo que se encuentra a unas 70 millas al este del moderno Sana’a, la capital de Yemen”, un antiguo altar fue desenterrado y contenía la inscripción, “cierto Biathar… un Nehemita”, donó el altar al templo. [6] Esta aparición de las letras raíz *NHM (los lenguajes Semitas antiguos no tenían vocales), es un fuerte indicador de la existencia del lugar antiguo llamado Nehem en el Libro de Mormón.

Abundancia

Si se han hecho grandes esfuerzos por ubicar el Valle de Lemuel y el lugar de entierro de Ismael, aun así es pequeño en comparación con la extensión de las incursiones arqueológicas para establecer donde construyó Nefi su barco y de dónde partió el grupo hacia el Nuevo Mundo, “Y permanecimos por el espacio de muchos años, sí, ocho años en el desierto. Y llegamos a la tierra que llamamos Abundancia, a causa de sus muchos frutos y también miel silvestre” (1 Nefi 17:4-5).[7] El consenso es que en algún lado a lo largo de la costa sur de Omán (un área en épocas rica en puertos naturales y vegetación), las condiciones fueron tales que el hijo de Lehi, Nefi, pudo haber encontrado el material necesario para construir un barco. Además, las familias habrían podido vivir allí, y haber encontrado alimentos y agua adecuados, por el período de tiempo que tan inmensa empresa podría requerir.

Fuentes
  1. El Instituto Neal A. Maxwell para Becas Religiosas ha publicado varios libros que aportan algo de luz sobre los orígenes antiguos del Libro de Mormón. Por ejemplo, Daniel C. Peterson, Donald W. Parry, y John W. Welch, eds., Echoes and Evidences of the Book of Mormon (Provo, UT: FARMS, 2002). La publicación insignia del Instituto, ahora titulada Journal of Book of Mormon and Other Restoration Scripture, ha publicado varios artículos que tratan sobre evidencias internas y externas a través de los años. Hay un libro de complemento para el primero Journal of FaithDVD: Journey of Faith: From Jerusalem to the Promised Land.
  2. Ver Lynn y Hope Hilton, In Search of Lehi’s Trail (Salt Lake City: Deseret Book, 1976). Se anima al lector a abrir las versiones PDF de los artículos aquí referenciados para ver las abundantes fotografías e ilustraciones que los acompañan.
  3. Ver, por ejemplo, la discusión, “Planning the Research on Oman: The End of Lehi’s Trail,”; “The Hunt for the Valley of Lemuel,”; “New Light: Nahom and the ‘Eastward’ Turn,”. Ver también, “The Golden Road,” en elJourney of Faith libro de complemento.
  4. “Introducción,”.
  5. S. Kent Brown, “Hunt for the Valley of Lemuel.”
  6. S. Kent Brown, “‘The Place That Was Called Nahom’: New Light from Ancient Yemen,”. Una investigación en la sede del Instituto Maxwell sobre “Nehem” le dará al lector varios artículos más que confirman esta evidencia.
  7. See, for instance, Warren P. Aston, “The Arabian Bountiful Discovered? Evidence for Nephi’s Bountiful,”; Richard Wellington y George Potter, “Lehi’s Trail: From the Valley of Lemuel to Nephi’s Harbor,”; Wm. Revell Phillips, “Mughsayl: Another Candidate for Land Bountiful,”.

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